El gran showman o como mal invertir una entrada al cine

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No a todo el mundo le agradan los musicales, a pesar de vivir en una era dónde la música no puede faltar en nuestro día a día, muchas personas no toleran ir al cine y ver que los personajes digan algunos diálogos para después ponerse a cantar y bailar. Tal vez por eso la producción de este género musical es escasa a comparación de otros géneros, aún así al año sale uno o dos musicales, como el caso reciente de El gran showman.

Este musical dirigido por Michael Gracey, y escrita por Michael Arndt, Jenny Bicks y Bill Condon, narra la historia de P.T. Barnum, quien fue fundador del circo Ringling Brothers and Barnum & Bailey Circus. Debo admitir que la razón por la que vi esta película es porque tiene que ver con algo relacionado con la escena, lo teatral, el espectáculo, al cual estoy vinculado y pensé por algún momento que quizá me podía atrapar, sin embargo, los personajes protagonizados por Hugh Jackman, Zac Efron, Rebecca Ferguson, Michelle Williams, Yahya Abdul-Mateen II, Natasha Liu Bordizzo y Zendaya, no lograron generar una empatía porque su desarrollo como personajes es escaso, no hay momentos en que uno se identifique con sus conflictos humanos porque no se potencializan y no llegan a ser punto de partida al menos para ponerse a cantar. Las cosas ocurren muy rápido, lo cual también es un factor para que no se genere un desarrollo adecuado en el transcurso de la trama y los personajes.

En cuanto a la musicalización, no es molesto que sea diferente a la época que estamos viendo, sin embargo tendría que tener coherencia con lo que ocurre, pero en algunas ocasiones, si no es que en todas, pareciera que las canciones están estampadas encima de las imágenes y que su única justificación es que hablan de lo que supuestamente sienten los personajes, pero no hay coincidencia entre los movimientos y las acciones, generando un distanciamiento con la escena. Un empalme musical que no provoca emociones con sus melodías pop.

Mal invertir una entrada al cine por ver un musical de 105 minutos no resulta ser recomendable, aunque muchas personas seguro se dejan llevar por la publicidad que le dieron y que tal vez en su cine favorito tiene una «garantía» de ser una buena película, cosa que dudo mucho que sea así.

Aún y con lo dicho, estuvo nominada a los Golden Globes 2018, en las categorías de mejor película-comedia o musical, mejor actor- comedia o musical (Hugh Jackman), mejor canción original, resultando ganadora de esta última. Pero, no hay que dejarse llevar por las nominaciones de estos premios, ya que no representan la garantía sobre un buen producto y la mejor opinión es la personal sin dejarse influenciar por otros.