
Crítica: lectura de la obra «A. Anaerobia»
Por Jennifer Peña y Daniel Gutiérrez
El pasado 30 de mayo del año 2019 se realizó la lectura en atril de la obra A. Anaerobia, de Berta Soní, ganadora del Premio Nacional de Dramaturgia “Emilio Carballido” UANL-UV 2018, en las instalaciones del Colegio Civil Centro Cultural Universitario, en Monterrey Nuevo León; el jurado que decidió de manera unánime a la obra ganadora estuvo a cargo de Teresa Valenzuela, Elvira Popova y Rubén González Garza, este último, decano del teatro en Nuevo León, quien falleció el pasado 7 de marzo de 2019, por lo que la lectura fue dedicada en su memoria.
La obra nos muestra al Profesor E, leído por Alfonso Teja, el cual se jubiló después de la muerte de su esposa, este hecho lo conduce a realizar una introspección y reflexión sobre sus metas, sueños y deseos que se cumplieron, o no, a lo largo de su vida, por lo que diferentes voces aparecen durante el texto para representar una variedad de personajes que fueron parte importante en el camino recorrido por el profesor; dichas voces fueron realizadas por Alex Saavedra, Mayra Vargas y Julio Vázquez.
Como obra ganadora de este premio nacional carece de sentido social, que aunque no es una obligación ni requisito dentro de la convocatoria es imprescindible en la contemporaneidad del país. Al ser una lectura nos podemos enterar de ciertos aspectos que en montaje no percibiríamos, la dedicatoria es un ejemplo. En ella encontramos «A mi padre», y conforme avanza la historia como espectadores deducimos que hay mucho de sentido personal en la obra, sin embargo esto debilita alguna posibilidad de identificación con alguno de los personajes, alejándonos de la trama y sus múltiples vertientes que propone la autora.
Es interesante la estructura y la manera en la que se abordan ciertos temas como las frustraciones al llegar a una etapa adulta, lo lejano que puede parecer la meta en una carrera, llámese vida, felicidad o la literalidad deportiva y educativa del termino «carrera». La autora encuentra en el glosario un camino para recalcar ciertas palabras que en el contexto dramático son importantes, haciendo juego con la primera letra (A) esta el título de la obra: A. Anaerobia
anaerobio -bia. 1. Adjetivo que significa ‘que no precisa oxígeno para vivir o para producirse’. Se aplica tanto a organismos vivos como a actividades o procesos.
Esta palabra nos conduce a lo largo de la historia, y tendría que ser el peso más importante de la trama. No obstante se diluye entre el argumento, lleno de recuerdos e instantes no necesariamente reales, personajes que carecen de un lenguaje propio y progresiones débiles.
La presentación de la lectura estuvo bajo la dirección de Elvira Popova, quien decidió realizarla a manera de lectura en atril para darle su importancia al texto más allá de las interpretaciones que puede ofrecer una propuesta escénica o una lectura dramatizada, por lo que en este aspecto no se le puede exigir mucho. Aunque se logró percibir ciertos toques de dirección que dotaban de signos a la lectura: la caja que se menciona en el texto utilizada como contenedor de palabras y los tenis que portaba cada actor, que hacían la referencia al trote de la obra, la carrera.
No obstante, si se puede realizar una observación a las condiciones del espacio empleado y la utilización de los recursos, porque los actores utilizaron micrófonos, éstos requieren de un buen manejo dependiendo del tipo lo cual no hubo, era evidente que no había un buen empleo de las tonalidades y sensaciones que un micrófono puede ofrecer, así como la acústica del espacio que en el área dónde se realizó la lectura es mala, había mucho eco y la ecualización no fue la adecuada. Puede decirse en favor de esta observación que ya se han realizado presentaciones ahí bajo las mismas condiciones, pero es precisamente el conocimiento del lugar lo que se debe de tener en cuenta para que el público no sufra o tenga que esforzarse por un mal audio, ya que el oído también pasa por un proceso de adecuación y durante dicho proceso se pierde gran parte de la información.
Un texto que como ejercicio estructural puede ser atractivo por la manera en la que se desarrolla la obra, pero como contenido no hay un gran aporte social o teatral, aunque la libertad temática que el Premio Nacional de Dramaturgia «Emilio Carballido» esto es lo que permite y ante eso se seguirán sosteniendo obras bien escritas, bien estructuradas, incluso atrevidas se puede decir, pero vacías en cuanto a su contenido sin responder a su contemporaneidad, que contrario a lo que dice Agamen, no divide ni interpola el tiempo, no está en grado de transformarlo y de ponerlo en relación con los otros tiempos, de leer de modo inédito la historia, de criticarla según una necesidad que no proviene en algún modo de su árbitro, sino de una exigencia a la cual no puede responder (7), lo cual, reiteramos, no es requisito para esta y muchas convocatorias, que también deja una decisión un tanto libre y complicada al jurada en turno.